Si uno de tus propósitos de Año Nuevo es aumentar tus oportunidades laborales y por tanto, tus ingresos, este artículo es para ti.

Ya sea que quieras entrar a una empresa importante, ejercer tu profesión en el extranjero o trabajar por tu parte, el objetivo es el mismo: mejorar tu situación profesional actual.

Uno de los errores más comunes es sólo plantearse un objetivo general y no ir midiendo el avance en el cumplimiento de las metas para tomar las acciones necesarias.

Las siguientes son unas recomendaciones a seguir para mejorar el desempeño profesional y no quitar los ojos de la meta ni perderse en el camino al éxito profesional.

1. Claridad en los deseos: Establece metas a corto y largo plazo para obtener una visión del lugar en el que te encuentras y los pequeños objetivos que tendrás que ir cumpliendo en orden para llegar al objetivo final. Esto ayudará a aumentar tu compromiso con el mismo.

2. Organiza la carga de trabajo: El trabajo acumulado produce bloqueo. Para cumplir tu meta final, deberás llevar a cabo muchísimas actividades que de verlas en conjunto y sin orden podrían hacerte sentir incapaz de realizarlas. Organízalas en horas asignadas en fechas para así aligerar la carga diaria.

3. Cuida tu red de contactos: Interactúa y socializa, a nadie le gusta la gente individualista que trabaja por su cuenta y es capaz de pasar encima de los demás con tal de lograr lo que quiere. Trabaja en equipo, relaciónate profesionalmente con la gente que vayas conociendo, aunque no sean de tu área no sabes en qué momento podrán ayudarte.

4. Busca capacitarte: Aunque las actividades que tengas que llevar a cabo para ir logrando tus metas a corto plazo sean muchas, date el tiempo para buscar capacitación técnica que te ayude a incrementar tu conocimiento. Esto te pondrá por encima de tu puesto actual de trabajo.

5. Anticípate: No esperes a que tu jefe te diga cuáles son tus áreas de oportunidad. Investiga, lee y prepárate anticipadamente.

6. Busca un mentor: Una figura de apoyo dentro o fuera de la oficina te ayudará a seguir tu camino y evitar distracciones sobre tus metas. En caso de perder el rumbo esta figura será la que te regrese nuevamente a tu objetivo.

7. Mejora tu comunicación: Que no te de miedo tratar temas delicados del trabajo con tu jefe. Las situaciones de riesgo producen incertidumbre y por ello los involucrados prefieren erróneamente no tocarlos. Planea qué dirás y de qué forma para evitar malos entendidos.

8. Prepárate para el cambio: El mundo profesional se encuentra en constante evolución y mantenerte en la misma posición no tiene probabilidades de ofrecerte un futuro prometedor. Si aún no has considerado moverte, este es el momento para hacerlo y evitar que alguien con más preparación te robe tu oportunidad.