Comúnmente escuchamos el término Ingeniería en Desarrollo de Software sin saber precisamente a qué se refiere.

El desarrollo de software implica la creación de un software desde su descripción, por lo que los desarrolladores se vuelven ingenieros, ya que son los responsables de esta construcción digital.

Es muy fácil percibir la aplicación y eficiencia de un software, ya que este es creado con un objetivo claro al ser introducido en una actividad para provocar cambios y efectos visibles.

En el proceso de desarrollo se involucran a varias personas para solucionar el problema mediante el software. Entre los involucrados se encuentran el cliente (quien busca la solución), el analista (quien recolecta los requerimientos y necesidades del cliente) y los programadores (a quienes les llega la información de los analistas para codificar y diseñar el sistema).

Para ayudar a comprender las fases del desarrollo web, se muestra una breve explicación de cada una de ellas:

Análisis: El analista se pone en contacto con la empresa que requiere el software, para comprender a fondo sus necesidades a través de las actividades que realiza, procesos y conformación. Esta fase es muy importante, ya que muchos software no están diseñados en base a las necesidades de la empresa y debido a esto, el funcionamiento termina siendo incorrecto.

Diseño: En esta fase entra el diseño del sistema, es decir, las pantallas y bases de datos. El diseño tiene que mostrar una apariencia fácil y amigable para el usuario, esto con el objetivo de evitar el mal uso del software por no comprender su funcionamiento.

Codificación: Aquí se desarrolla todo el código del sistema. Los ingenieros y programadores especialistas son los únicos encargados de esto.

Pruebas: En esta fase, el sistema se pone a prueba para conocer los posibles errores y de qué forma se pueden solucionar para alcanzar los estándares de calidad que los programas requieren.