Hoy en día vivimos en un entorno lleno de herramientas computacionales (smartphones, computadoras, tabletas electrónicas, relojes inteligentes, y una larga lista de etc.), así como la dependencia a las tecnologías de comunicación (internet, teléfono, mensajería instantánea), lo cual hace innegable la importancia  que al respecto tiene el software que las hace funcionar.

La tendencia de los usuarios finales tiene que ver con el modelo de computación en la nube, en la cual, se tiene acceso a los datos y las aplicaciones a través de Internet; mismo, que posibilita cambiar del entorno de las computadoras personales hacia los dispositivos móviles como laptops, tabletas electrónicas, teléfonos inteligentes, entre otros, que permitan acceder a información en prácticamente cualquier lugar y en cualquier momento.  De acuerdo a un estudio de salarios realizado en noviembre 2014 por Galván existe en el mercado actual una alta demanda de personal que dominen lenguajes de programación para el desarrollo de software para plataformas  móviles, como por ejemplo Objective C.

Aunque la programación es un proceso mediante el cual se escribe (en algún lenguaje específico de programación como por ejemplo, Java, C, C#, etc.), se prueba, se depura y se mantiene el código fuente de un cierto programa informático, cada programa forma parte de un todo al que se puede denominar software; que es la parte intangible con la que se consigue que el hardware de la computadora brinde una determinada funcionalidad y que sin el los dispositivos sólo serían un conjunto de componentes electrónicos de poca utilidad.

Sin embargo, el desarrollo de software es un proceso complejo, y a veces por su naturaleza, su complejidad es poco apreciada. Los modelos de desarrollo de software conforman una disciplina denominada Ingeniería de Software que puede variar en función de la aplicación o necesidad de software de la que se trate, y las plataformas de software específico para cada entorno que pueden ir desde ambientes domésticos, de oficinas, de industrias hasta ambientes científicos.

De tal forma que se puede decir que el desarrollo de software a la medida o comercial, industrial o científico, es y será una industria en constante innovación a la que hay que atender desde este momento para lograr ingresar y competir en el mercado globalizado en el que México se ve inmerso actualmente.

De acuerdo a la agenda sectorial para el desarrollo de las tecnologías de la información en México 2014-2024, “los servicios de tecnologías de la información (TI) deben actuar como catalizadores de innovación y productividad en el resto de los sectores económicos y por ello son una prioridad nacional” , además que se reconoce que “el sector de TI en México tiene grandes oportunidades para crecer, impactar en el mercado interno y posicionarse como proveedor global de servicios de TI”, lo anterior, por supuesto, incluye al desarrollo de software.

Entre los factores que plantea dicha agenda para poder lograr el éxito en el ecosistema de TI, la Academia debe fungir como habilitadora de TI, en conjunto con organismos empresariales y de gobierno para así contribuir a la oferta de TI (como por ejemplo: servicios, software, etc.) y cubrir la demanda de TI (que requieren tanto el gobierno como las empresas usuarias de TI).

Fuente: Milenio